Es un hecho que vivimos en una sociedad cada vez más concienciada con la protección del medio ambiente. También más preocupada por la calidad de las condiciones ambientales que la rodean y más sensibilizada sobre las emisiones y vertidos industriales que puedan afectar a la salud de las personas de uno u otro modo.
Prueba de ello es el incremento de noticias que aparecen en medios de comunicación al respecto y que obligan a las empresas no sólo a cumplir la normativa vigente sino a ir más allá para mantener una imagen, como mínimo aceptable, frente a la opinión pública.
La legislación vigente al respecto sigue de cerca esta creciente sensibilización dando lugar a la creación de diversas normativas tanto nacionales como internacionales con el fin de controlar y limitar las emisiones de la industria al exterior. Así mismo también debe existir un control ambiental de las condiciones de trabajo a las que están expuestos los operarios en el interior de la instalación.
En función de la actividad desarrollada deben cumplirse algunos aspectos normativos para ajustarse a las condiciones de seguridad y confortabilidad dictadas por ley. Algunos parámetros a monitorizar y corregir son los relacionados con temperatura, humedad, iluminación, ruido y contaminación.
El diseño de la monitorización del impacto que tiene una industria respecto al medio ambiente se realiza de manera específica para cada tipo de instalación. Los aspectos fundamentales donde debe incidir el control son:
Existen sistemas automáticos que monitorizan las emisiones atmosféricas que requieren mantenimiento periódico y calibración específica para que su funcionamiento sea correcto. En el apartado de emisiones de gases y vapores a la atmósfera pueden definirse cinco contaminantes principales que se deben evitar: Monóxido de carbono, óxidos de azufre, hidrocarburos, óxidos de nitrógeno y material en partículas.
Deben tomarse muestras y realizarse análisis de los vertidos que puedan evacuarse. También de las aguas que rodean la instalación y sean susceptibles de contaminarse como aguas marinas, superficiales o subterráneas.
En actividades o instalaciones industriales potencialmente contaminantes se ejecutan evaluaciones de calidad del suelo de cara a realizar informes de seguimiento y control. En el caso de una eventual contaminación del suelo ha de llevarse a cabo una operación de descontaminación verificada y certificada. Al hilo de esto se realiza una caracterización de los residuos en función de su composición, comportamiento y posibles efectos toxicológicos.
Envira Ingenieros Asesores es la empresa que dentro del grupo Ingenieros Asesores dedicada al trabajo de estas cuestiones. Acreditada y certificada, con amplia experiencia en el campo de la monitorización, comprometida con el medio ambiente y avalada por numerosos casos de éxito.
